domingo, 24 de abril de 2016

Nyumbani en el Vado del Quema

Hoy nuestra Tropa hemos hecho jornada de ruta por el Corredor Verde del Guadiamar.

Para empezar, en el Centro de interpretación nos han recordado el desastre ecológico que supuso la ruptura de la balsa de residuos de la mina a cielo abierto (corta) Boliden en Aznalcollar, hace ya 18 años.

Hemos desayunado sobre el puente romano, observando sus ojos, ya casi cubiertos por tierra de las crecidas del río Guadiamar.

Y ya en el tramo de Corredor que hemos transitado, hemos disfrutado de una jornada estupenda de temperatura, con el buen ambiente y buen humor de nuestra tropa.

Ranas que saltaban a nuestro paso, cantos de cuco, Zorzales, herrerillos, el vuelo elegante de las garzas y golondrinas... Y la explosión verde de la Naturaleza en esta época, favorecida por las últimas lluvias, que nos han obligado a buscar pasos alternativos cuando los charcos ocupaban nuestro camino.

Desde este bosque de galeria, también hemos podido localizar el enclave de un antiguo molino harinero, del cual solo queda el desnivel de altura del río, por el que "trepan" los barbos en esta época, buscando aguas arriba para desovar.

Y para terminar nuestra ruta hemos llegado a comer al Vado del río Guadiamar (el río de los principed, Wadi-amar para los árabes), llamado "Quema" en este tramo ya que transita por una finca que lleva ese nombre.

En unos días, las hermandades del Rocio de los caminos de Sevilla, pasarán por este punto, pero hoy lo hemos disfrutado nosotros, y entre risas y muchos juegos, se nos ha echado el tiempo, como siempre que estamos juntos, con ganas de más...





lunes, 11 de abril de 2016

Nuevos Ojos de Halcón .... y la extraña carta

Si os acordáis, en el FLORA III habíamos llegado a los 10 caballeros Ojos de Halcón. Desde entonces, dos de ellos han dejado de estar activos en el grupo, por lo tanto aún quedan 4 caballeros para completar los 12 que se mencionaban en el primero de los pergaminos que llegaron a nuestras manos.

Este FLORA era un momento propicio, y que mejor escenario para hacerlo que un fuego de campamento.




Todo el grupo se apretujaba alrededor de la espléndida fogata. Era el momento. Hicimos la entrega de 3 Ojos de Horus o de Halcón a 3 nuevos caballeros. Uno, aún queda en la caja, aún falta por designar el caballero número 12.




También aprovechamos el momento para felicitar a la familia que por su entrega y buen hacer habían ganado el pendón del FLORA V: los DRAGONES.

Y como no, procedimos a leer la misteriosa carta que hallamos en el cofre enterrado bajo el pino.

Os transcribo a continuación su contenido:


"Mi nombre es Antonio Rodríguez "el cartujano". Lo de cartujano es porque nací en una humilde casita junto a la Cartuja de Jeréz de la Frontera. Hace unos años que la mala fortuna y la injusticia social me llevó a convertirme en uno de los bandoleros más conocidos de estos parajes. Mi campo de acción son las sierras de Huelva, Sevilla y Cádiz. Hace unos meses, nuestras expediciones nos llevó hasta Cortegana. Alguien nos había comentado que en su castillo se guardaba un increíble tesoro.  
Asaltamos el castillo y poco oro pudimos encontrar. Algunas monedas y poco más. Lo que sí me traje conmigo fue una extraña llave que hallé junto a un antiguo libro.
Ese fue el inicio de la historia que ha motivado el escrito de esta carta.
Por casualidad, o porque el destino así lo tenía previsto, cuando regresábamos a la Sierra del Aljibe, nos refugiamos en un viejo molino a pasar la noche. El "molino de Andrés", creo que le llamaban.
Hicimos una hoguera y charlábamos relajadamente a su alrededor. Me retiré unos metros para descansar y hubo un detalle que llamó sobremanera mi atención.
En la pared de enfrente de donde me había apoyado, había una puerta con un extraño grabado en su dintel. La imagen me recordaba a algo conocido. Tras unos minutos dubitativo, caí en el origen de  mi recuerdo. El grabado del dintel era la misma figura que tenía la llave que días antes había encontrado en el castillo de Cortegana.
La puerta estaba cerrada.
- ¿La abrirá la extraña llave?, pensé mientras la buscaba en el bolsillo interior de mi chaquetilla.
Así fue, se abrió. La atravesé y cual fue mi sorpresa que de repente me hallaba en medio de un salón, de lo que parecía la Torre Mayor de una fortaleza. 
Sorprendido y aturdido, trataba de poner en orden mis pensamientos. ¿Qué había sucedido? 
- Por fin alguien que nos visita, escuché a mis espaladas. 
Me giré rápidamente y allí observé a una especie de guerrero ataviado de singular ropaje. 
El resto de la historia tendréis que esperar a otro momento para conocerla. 
En este cofre os dejo esta carta (junto a un amuleto del que algún día comprenderéis su significado), como testimonio de que mi desaparición repentina se debe a que he decidido cambiar de vida, ¡de época incluso! 
Quien esté leyendo esta carta seguramente estará buscando mi tesoro más preciado. 
Sabed que ahora vivo en la otra punta de España. En las Merindades de Burgos. 
Sólo he vuelto para dejaros esta carta y alguna muestra del incalculable tesoro que ahora poseo. 
Si alguno decidiese seguir mis pasos, buscadme. Tarde o temprano me encontrareis (o seré yo quien os encuentre). 
Eso sí, lo mismo podéis verme como bandolero, caballero del Temple o pirata en las costas africanas.

Firmado en Alcalá de los Gazules, el día del señor de 1 de abril de 1824.

Antonio Rodríguez (ahora, Capitán Rodríguez).








FLORA V: encontramos el cofre

Las 8 familias salieron en busca de alguna pista que les llevara hasta la llave del tiempo.

El paisaje era espléndido, un antiguo sendero que discurría junto a los molinos alimentados por el río Rocinejo.

Ese antiguo camino, también llamado de "los quintos" es el que utilizaban todos los mozos de la zona cuando, por edad, les tocaba ir a inscribirse a filas a la capital gaditana. Dos días andando empleaban.

Lo que no se esperaban nuestras familias es que unos singulares bandoleros y personajes mágicos también andaban por aquellos lares.









Tuvieron que atravesar riachuelos, superar pruebas de los bandoleros para que le perdonaran la vida y la bolsa del dinero y acertar extrañas adivinanzas que el druida Gaspatín, el mago Pablín y la bruja Celiana le iban planteando a lo largo del recorrido.









Poco a poco las distintas familias fueron obteniendo pistas de nuestros singulares personaje mágicos y pudieron deducir donde podría estar la llave escondida.

Unas familias antes que otras, pero todas llegaron al lugar donde se suponía estaría el objeto, el único pino de todo el valle.

Después de varios minutos, quitar ramas, levantar piedras y excavar aquí y allí, por fin encontraron una curiosa caja...



Para decepción de todos, la caja no contenía ninguna llave mágica. Sólo monedas y una carta.... una extensa carta.

Volvimos al campamento sin leerla, esa noche ya buscaríamos el momento apropiado para su lectura.



domingo, 10 de abril de 2016

Una de bandoleros: el FLORA V

En este FLORA estábamos decidido a encontrar la famosa llave del tiempo.

La única pista que teníamos era que fue robada del castillo de Cortegana por unos bandoleros allá por el siglo XIX. Sabíamos que sería una empresa difícil, pero había que intentarlo.

Fueron convocadas de nuevo las 8 familias (recordadme que en otra ocasión os cuente la historia del origen de cada una de ellas, es muy curiosa).

Sabíamos que la banda de bandoleros que asaltó el castillo tenía su base por la Sierra del Aljibe, en pleno corazón del Parque Los Alcornocales.

Por lo que pudimos averiguar, con frecuencia se les veía por la Ruta de los Molinos, entre Alcalá de los Gazules y Jimena de la Frontera.

Por allí discurre el caudaloso río Rocinejo, y de ahí que hubiera tantos molinos. Actualmente sólo uno está habitado, aunque por lo que nos comentaron tampoco es previsible que dure mucho tiempo. 

Su dueño, Andrés el molinero, es un hombre mayor. Vive únicamente con su hija a la que todos la llaman La Loca. La pobre está un poco trastornada, siempre anda contando historias en las que la visitan magos, druidas y hechiceras de tiempos pasados.

Pero volviendo a nuestro relato, para esta búsqueda hemos vuelto a convocar a las 8 familias.

PISAGODOS



 CELESTIALES


FALCONES DE LIS


ENCINAS


WILD PIGS


FORTALEZAS



 DRAGONES


 GRIFOS


La verdad es que nuestras familiar vivieron una mágica aventura: asaltos de bandoleros, encuentros con magos, druidas y brujas, búsqueda de un tesoro,.... y un escenario muy muy especial, con algunos personajes autóctonos de gran peso

Mejor os lo cuento poco a poco.



sábado, 9 de abril de 2016

Vuelve el misterio: FLORA IV

La 4ª Ronda del Halcón se iniciaba: NOVA, POLAR, FLORA….

Nuestro FLORA IV lo celebramos en Cortegana, del 17 al 19 de marzo de 2015.

Lo ambientamos, al igual que en el caso anterior, en “Las tres culturas”. Teníamos un escenario de lujo, el castillo de Cortegana.



De nuevo hicimos juegos florales y por segundo año consecutivo el Pendón se lo llevó la familia “Grifos”.




Ya casi no me acordaba de las misteriosas apariciones de los pergaminos de años anteriores, pero hubo un detalle que me llamó sobremanera la atención.

En una de las estancias del fabuloso castillo que visitamos había un libro antiguo que, según nos comentó la guía, versaba sobre las andanzas de los caballeros que en su día habitaron por aquellas tierras. La convencí para que me dejara echadle un vistazo. 



Casi se me cae de las manos cuando al abrirlo leo el encabezado de uno de sus capítulos “Historia de los 12 hermanos del Halcón”.

En una lectura rápida pude comprobar que la narración era similar a lo que se contaba en el primer pergamino que llegó a mis manos: caballeros que hacen el bien, viajes en el tiempo, personajes misteriosos … y un objeto enigmático … la llave del tiempo.


Con la adrenalina al máximo le pregunté a nuestra guía cuanto de verdad tenían las leyendas del manuscrito.

Me comentó que según ella había sabido, los estudiosos habían catalogado aquel libro como auténtico. Lo habían datado de finales del siglo XIII, y según contaba la tradición era costumbre de aquella época que de cada una de las familias nobles de la zona algún joven caballero dedicara su vida al servicio de la hermandad.

Al parecer, me siguió contando, acompañando al libro había una llave. La cual desapareció después del robo realizado en el castillo por unos bandoleros a mediados del siglo XIX.

Ahora lo veía claro, esa era nuestra misión: encontrar la llave del tiempo y restituir la hermandad de los 12 caballeros.






Y llegó el FLORA III

La tercera Ronda comenzó, y como siempre nos pusimos a programar las salidas de grupo.

Se planteó continuar con el FLORA y su ambientación. Se trataba de poner en evidencia la convivencia pacífica que durante varios siglos se dio en España por personas de diferentes religiones.

Para el FLORA III, el sitio elegido fue el Camping El Martinete en San Nicolás del Puerto. Del 25 al 27 de abril de 2014.









Los chavales disfrutaron de lo lindo, y  una vez más… entrega de Ojos de Horus (u Ojos de Halcón como también le llamamos). Esta vez fueron 3 los nuevos caballeros, llegábamos ya a 10.

Esperaba ansioso alguna señal, los misterios en el FLORA se iban convirtiendo en tradición y esta vez deseaba que no fuera menos. Pero no hubo nada extraño, ni mensaje, ni pergamino, ni indicio de nada. 

El encanto se había roto, como se suele decir: ¡fue hermoso mientras duró!


Nuestro FLORA II y los Ojos de Halcón

Pasaron los meses y llegó el momento de la programación de la siguiente ronda, la 2ª del Halcón. Fue en ese momento cuando volví a recordar que aún tenía guardado en un cajón de mi despacho un viejo pergamino y 12 colgantes de Ojos de Horus.

Se me ocurrió una idea, ¿por qué no hacer entrega de  los colgantes e intentar seguir las instrucciones del pergamino?

Convencí al Consejo de que deberíamos programar una  acampada de grupo en primavera y que ¿por qué no llamarla FLORA? Y ya puestos, por qué no la ambientábamos en un tiempo pasado y organizábamos el Día del Halcón.

Todo salió aprobado, así que tenía el marco ideal para seguir las instrucciones del pergamino: una acampada en primavera y un “viaje en el tiempo”. ¡Qué nervios! Y todo esto, sin comentarlo con nadie más.

Llegó el momento del FLORA II. Esta vez el sitio elegido fue la Finca La Traviesa en Almadén de la Plata. La ambientación, la Edad Media. Del 12 al 14 de abril de 2013.





Se organizaron familias y se celebraron juegos florales. Hasta teníamos un pendón para el grupo ganador.

Quizás no lo creáis, pero nadie estaba al tanto de lo que iba a acontecer, hice entrega de los primeros Ojos de Halcón a algunos caballeros. Yo mismo me preguntaba:

- ¿Y después de esto, que pasará?

Estos fueron los primeros caballeros.







Con esta entrega, los primeros 6 Ojos de Horus que me habían dado hace un año ya tenían dueño. Mi pregunta era ¿ahora qué?

No sé muy bien por qué, pero decidí que aún no era el momento de compartir con mis compañeros el origen de dichos colgantes, algo me decía que debía esperar.

El FLORA II se acababa y todos andábamos de recogida. Mientras los chavales preparaban las mochilas y esperábamos los autobuses, me acerqué al pueblo a pagar el alquiler de las instalaciones y dejar las llaves.

Cual fue mi sorpresa que cuando ya me iba del ayuntamiento me comentaron que habían dejado un sobre para nosotros. 

Lo recogí y me dispuse a ver su contenido. Mi corazón se aceleró de golpe, el sobre contenía un pergamino similar a aquel que un año antes me había entregado el misterioso scout en aquel tren volviendo de Cazalla.

Esta vez el texto era más corto que en el caso anterior, decía así:

“Has hecho entrega de los primeros 6 Ojos de Horus, en primavera y en un viaje por el tiempo.
Tu misión no estará completa hasta que los 12 hermanos estén juntos. 
Recuerda, aquel que porta este amuleto tendrá la grata responsabilidad de servir a los demás, promover el bien a su alrededor y luchar por un mundo mejor. 
Sigue buscando tu caballeros”

¡Vaya intriga!, un nuevo pergamino misterioso y una tarea por delante.

Nuestro trabajo en el grupo continuó y el próximo evento era el SOLAR II.

Nos fuimos a Cazorla por segunda vez, allí tuve la grata sorpresa de que los 6 Ojos de Horus habían decidido otorgarme a mí el séptimo colgante. Si bien era verdad que yo guardaba todos desde su aparición (cosa que nadie sabía), no se me había impuesto ninguno formalmente.

Ya éramos 7 caballeros, aún quedaban 5 por buscar.